Fecha: Primer fin de semana de Mayo.
La exaltación de la Santa Cruz es una de las fiestas más importante de El Buitrón.
Esta fiesta tienes varias connotaciones; hay que nombrar la importancia que tiene los mayordomos de la Cruz y los de la Bandera. Los primeros, deben ser un matrimonio, es decir, su estado civil tiene que ser casado y son los que llevan la responsabilidad de la celebración de la fiesta durante todo un año. Los segundos, (también llamados mozos de la Bandera), deben ser mocitos, es decir, su estado civil tiene que ser soltero.
Esta fiesta tiene tres insignias muy importante como son: dos cruces, una de ellas es la que durante la fiesta está expuesta al público y la otra es la que se pone en el paso durante la procesión, y la otra insignia es una bandera bordada en las dos caras, una en azul y otra en roja, que representa a los mayordomos de la Bandera, como su propio nombre indica.
La fiesta de la Santa Cruz la podemos dividir en dos días muy especiales para la aldea: el sábado y el domingo.
SÁBADO
Los mayordomos de la Bandera primeramente han ido al campo para recoger romero y ponerlo en un campo cercano de la aldea.
El sábado por la tarde comienza el tradicional Romero. Desde la iglesia salen los mayordomos de la Cruz y los de la Bandera en procesión hacia la ermita, portando cada mayordoma en sus manos sus insignias. Una vez que entran en la ermita, la mayordoma de la Cruz pone en el altar la Cruz para que todas las personas la adoren. Dicho altar está adornado siguiendo la tradición de la aldea. La encargada de hacerlo es una vecina que utiliza unas cortinas blancas, a la cual le va dando forma de panal de abejas, y va cosiendo flores de colores.
Una vez puesta la Cruz es su sitio, la mayordoma de la Bandera sale de la ermita con la bandera y se dirige en busca de su mayordomo que la espera montado a caballo. Ella le pasa la bandera y se monta a la grupa del caballo. Juntos y portando el mayordomo la bandera sujetada en el estribo, inician el recorrido hacia el lugar donde habían depositado el romero. Durante el trayecto la gente van entonando canciones típicas y populares. Siguiendo a los mayordomos de la Bandera van todos los caballista de la aldea y de los alrededores que los quieran acompañar. Todos los asistentes a la fiesta esperan bailando y cantando a los mayordomos en la Cruz del Calvario (una cruz situada en la carretera de acceso a la aldea).
Cuando que los mayordomos han recogido el romero se dirigen al lugar donde la gente los espera. Cuando llegan, la tradición indica que tanto los mayordomos de la Bandera como el resto de caballistas tienen que dar tres vueltas a la Cruz del Calvario.
Atardecer en el Romero
Tras estas vueltas, la cometida se encamina hacia las calles de la aldea para a continuación dirigirse a la ermita, donde los mayordomos dejan la bandera al lado de la Cruz, extienden el romero en el suelo y los asistentes allí congregados entonan a la Cruz unas antiquísimas coplas típicas de la aldea, como son por ejemplo las siguientes:
Vamos por el romerito
De las flores azuladas
Para ponerle a la Cruz
Una preciosa guirnalda
La moza de la bandera
Va que parece una rosa
Con la bandera en la mano
Tan linda y tan primorosa
La bandera está bordada
Con sangre de una paloma
Y eso que quiere decir
Que viva la mayordoma
DOMINGO
El domingo por la mañana se hace la homilía de la santa misa y la procesión de la santa cruz que es portada en hombros por los buitronejos y buitronejas, por todas las calles empedradas de la aldea.
Una vez que el paso de la Santa Cruz vuelve al Templo, los mayordomos se dirigen hacia la ermita para depositar la bandera y adorar la Cruz con típicos cánticos como:
Mayordoma de la Cruz
Acércate a la bandera
Porque ya viene cansada
La pobre, tu compañera.
Cruz bendita y adorada
Que estás en el campo sola
Donde murió Jesucristo
Hijo de nuestra Señora.
Bendita la Santa Cruz
Bendita quien la compone
Y también bendita sea
La que lo ramos le pone.
Este mismo día por la tarde se vuelve a sacar el paso en procesión por las calles de El Buitrón. Una vez que ha llegado de nuevo a las puerta de la iglesia el paso es colocado a la entrada para empezar con una puja muy curiosa y que aún se conserva desde tiempo inmemorial.
Procesión de la Santa Cruz
El paso de madera donde va enclavada la Cruz tiene cuatro brazos para que pueda ser llevada a hombros; a estos brazos del paso se les llama "bancos”.
Una vez colocado el paso en la entrada los habitantes de El Buitrón se colocan alrededor de él. La puja empieza poniendo precio a cada banco y se puja el precio en fanegas de trigo, una unidad de medida histórica. Una vez que se han dicho en cuanto está valorado en fanegas cada banco, se coge el paso en volandas y se empuja por ambos lados. La gente que puja intentará meter el paso en la Iglesia mientras que el resto intentará impedirlo para que se puje una cantidad más alta. Si no se consigue meter el paso en la iglesia, se vuelve a subir el precio de los bancos y así sucesivamente hasta que el paso consigue entrar en la iglesia.
A continuación se puja por la bandera. El mayordomo de la bandera sale a la puerta de la iglesia y pone un precio a la misma, el cual será el precio de salida. Se empieza a pujar hasta que nadie de más, siendo el vecino/a quien haya pujado más alto el encargado de introducir la bandera en el templo.
Una vez terminada las pujas, sale a la puerta del templo el mayordomo de la Cruz y pregunta en voz alta si hay alguien de promesa que quiere ser mayordomo de la Cruz durante el próximo año. Si no hay nadie nombrará en voz alta a los nuevos mayordomos. A continuación el mayordomo de la bandera nombrará los mayordomos de la bandera para el próximo año.
Seguidamente se quita la Cruz del paso cogiéndola en sus manos la mayordoma de la Cruz para ir a la casa de los nuevos mayordomos, que esperan en su puerta. Entre besos y abrazos, risas y llantos, se hace la entrega de la Cruz, que será quién les guie y cuide durante el siguiente año. Así mismo, la mayordoma de la bandera se dirige con la misma hacia la casa de los nuevos mayordomos para darles la bandera que los representarán durante el año siguiente.
La comitiva se encamina hacia la iglesia par dejar allí la Cruz, y posteriormente dirigirse hacia la ermita. Allí, los mayordomos entrantes como los salientes, delante de la Cruz, se presentan y se despiden de ella. En este acto también se cantan las típicas coplas de la aldea.